Descripción

Pólvora en el sueño, de Miguel Ángel Velasco

Pólvora en el sueño es una antología que recorre los mejores libros que publicó Miguel Ángel Velasco y en los que él veía más logrado su oficio de poeta. Abarcan poemas de los libros: El sermón del fresno (1995), El dibujo de la savia (1998), La vida desatada (2000), La miel salvaje (2003), Fuego de rueda (2006), Memoria del trasluz (2008), Ánima de cañón (2010) y, su libro póstumo de inéditos (edición de Isabel Escudero) La muerte una vez más (2012). Esta antología se completa con cinco textos en prosa y tres entrevistas recopilados de varias publicaciones en revistas y prensa. Completa el volumen el excelente prólogo llevado a cabo por el poeta navarro Alfredo Rodríguez (encargado de la edición), donde se muestran pautas para conocer más a fondo la vida y obra de Velasco, sin duda uno de los mejores poetas de nuestra Lengua en estos últimos 30 años.

AUTOR Miguel Ángel Velasco

(Palma de Mallorca 1963 – 2010) Cursó estudios de Filología y Filosofía en la Universidad Complutense de Madrid y fue colaborador habitual de la revista Archipiélago. Cuadernos de Crítica de la Cultura. Su tarea como investigador se centró en la obra de Elias Canetti. En 1979, a los dieciséis años, obtiene un accésit del Premio Adonáis con Sobre el silencio y otros llantos (Rialp, 1980) galardón con el que se alzaría dos años después con Las berlinas del sueño (Rialp, 1981). En 1985 consigue el Ciudad de Melilla con Pericoloso Sporgersi (Libertarias, 1986). Tras un fructífero período de silencio reaparece con El sermón del fresno (Pamiela, 1995), al que siguen El dibujo de la savia (Lucina, 1998) y La vida desatada (Pre-Textos, 2000), finalista del Premio Nacional de Poesía. Con La miel salvaje (Visor, 2003) obtiene el Premio Loewe y con Fuego de rueda (Visor, 2006) el Fray Luis de León. Después publica La mirada sin dueño, una antología confeccionada por Vicente Gallego (Renacimiento, 2008). Un año antes había ganado el Oliver Belmás con Memoria del trasluz (Tres Fronteras, 2008). En 2010, meses antes de morir, publica Ánima de cañón (Renacimiento). En el volumen póstumo La muerte una vez más (Tusquets, 2012) se recoge su obra inédita preparada por Isabel Escudero.

OTROS AUTORES HABLAN DE LA OBRA Y SOBRE EL AUTOR

“En estos poemas seleccionados la emoción y la verdad artísticas están presentes, el arte del verso y la poesía verdadera. Ésta para el poeta no es un adorno del lenguaje, sino el fundamento mismo del existir humano, un fundamento que, propiamente, no es humano. Es el arte como única justificación de la existencia. Y ello gracias al don de un hombre que tiene siempre insaciada sed de observador, constante inquietud, y a través de cuyos poemas el lector vive en un tiempo no fragmentado en el que todo sucede.”

“Hombre cuya vida fue una continua lucha, y que no se enfrentó a la poesía como una manera de ganarse el pan (eso no era de artista) sino como un modo de indagar en la vida y, por tanto, de volverse arte, como ascesis estética, como milagro de palabras, de sentidos, de infinitud, de belleza. Lo que hace de la suya una obra impregnada de una suerte de sabiduría muy especial, tocada por alguna forma de gracia.”

“Miguel Ángel Velasco fue seguramente el último poeta que vivió perpetuamente entregado a la poesía, siempre en busca o a la espera del poema. Invocaba en sus versos esa revelación luminosa. Como conjuro, como redención.”

Alfredo Rodríguez

“Su literatura se convierte en don (don de explicar ese don que nos une), posibilidad de comunicar una experiencia que es presencia silenciosa y aspiración máxima de la palabra poética. El autor, la obra y la droga se hacen savia. La poesía vuelve a ponerse al servicio de los dioses.”

Marta Herrero Gil

“El don de la mirada es lo que canta Velasco sin cesar, y lo que tiene de religioso esta poesía es su modo de creer en la belleza de este mundo”.

Vicente Gallego

“Miguel Ángel Velasco era un ser de una sensibilidad tan extraordinaria como exquisitamente personal. Se enfrentaba al mundo con todos los sentidos completamente abiertos, ávidos de apurar el cáliz de la vida, desde sus mayores y transcendentales manifestaciones hasta la belleza de las cosas diminutas y cotidianas, sabedor de que, como si de un fenómeno fractal se tratase, la inmensidad del universo se reproduce a escala en cada uno de sus humildes fragmentos.”

Raquel Lanseros

“Un poeta elegíaco, cuya obra lamenta la condición del mundo, pero celebra con efusión los momentos de intensidad que el azar nos concede”.

Carlos Marzal

“De él aprendí la singularidad de una mirada atenta por igual a lo pequeño y a lo grande, a lo cercano y a lo lejano. Juntos miramos el preciso baile de la araña, el oro en la resina del pino, la minucia vegetal, las brasas, el ammonites…”

José Saborit

Medidas: 14 cm x 21 cm.

Papel: natural 90 g.

Cubierta: blanda, rústica. Mate plastificado 300 g.

Nº páginas: 320.

Tapa: blanda, rústica con solapas.

ISBN:   978-84-946822-1-6